“En la cosmología del hinduismo existen unos ciclos cósmicos o yugas de miles o millones de años de duración, que se van sucediendo eternamente. La concepción hindú del tiempo no es lineal; no existe un origen ni un fin del tiempo. El tiempo es cíclico. Su percepción varía según el plano de existencia o nivel de conciencia del sujeto que lo experimenta. Millones de universos son creados, existen durante larguísimos periodos de tiempo, y son destruidos, reabsorbiéndose en la esencia de la que emanaron, para de esta forma dar paso a otro nuevo ciclo que vuelve a empezar. Creación, preservación y destrucción se suceden eternamente.”
“En la cosmología del hinduismo, cuando hablamos de los dioses, de los procesos cósmicos, estamos hablando de nosotros mismos. No existe función en el macrocosmos que no tenga lugar en el microcosmos.”