Detenido por un incendio que obligó a desalojar a 30 personas

La Guardia Urbana detuvo ayer por la tarde a un hombre de unos 40 años acusado de provocar un fuego de madrugada en el número 9 de la calle Sant Ruf que obligó a desalojar a unos treinta vecinos de este edificio y de los dos colindantes. Además, una mujer resultó herida leve por intoxicación de humo. Al parecer, el hombre habría prendido fuego en una las viviendas de la parte superior del edificio, bajo cubierta, donde muchos de los pisos están okupados.

Se trataría de una venganza por un altercado previo y fue arrestado cuando le identificaron caminando por la LL-11. El hombre, nacido en Rumanía, habría reconocido que era el autor del incendio, por lo que fue arrestado. Los Bomberos recibieron el aviso del fuego a las 03.46 horas y tuvieron que rescatar a uno de los vecinos, que resultó ileso, por la fachada y el SEM evacuó a la intoxicada por humo.

También tuvieron que salir de casa los vecinos de los inmuebles colindantes (seis del número 7 y 13 del número 11), aunque sobre las 7.00 horas pudieron volver a sus pisos. Los equipos de extinción acudieron con 10 dotaciones y dieron el fuego por controlado sobre las 5.40 horas, aunque durante toda la mañana estuvieron trabajando. El alcalde, Miquel Pueyo, acudió a Sant Ruf de madrugada para interesarse por lo sucedido.

Por su parte, la arquitecta municipal valoró el estado del edificio con la ayuda de los Bomberos y determinó que “no reúne las condiciones de habitabilidad, seguridad y salubridad. Por el momento no se podrá volver al edificio”, según informó la Paeria. El equipo de guardia de Servicios Sociales atendió a los 10 desalojados del edificio incendiado, de los que se pudieron recuperar algunas pertenencias y se les ofreció alojamiento de urgencia.

Los vecinos denunciaron que llevan tiempo alertando de los problemas de incivismo en el bloque y que han presentado quejas a la Paeria.