Polonia importará “inmigrantes” blancos polacos en lugar de negros y moros

Siempre un paso por delante, los países que más sufrieron las bondades del bloque soviético vuelven a darnos lecciones a todo el conjunto de países europeos recuperando a los polacos que dejaron el país hace años en lugar de llenar el país de subhumanos.

El Economista:

Tras años de crecimiento económico, la tasa de paro es del 3,6%. Es la tasa de desempleo más baja de toda la historia, lo que está provocando que las empresas del país sufran serias dificultades para encontrar a los trabajadores que necesitan. Por eso, Polonia planea atraer a cientos de miles de polacos que emigraron hace años del país o residentes en el extranjero para mantener sus tasas de crecimiento.​

Polonia es un país con una sociedad conservadora y con poca tolerancia hacia la inmigración, de hecho, el país tiene un escaso 1% de población extranjera y aproximadamente el 60% de la población es contraria a recibir refugiados.

Según la prensa judía, Polonia es cada día un poco más nazi-fascista por querer mantenerse polaca. Hablan de las distinciones que hacen en el país entre los inmigrantes buenos, que serían los cristianos blancos ucranianos e inmigrantes malos, que serían los musulmanes, como si no fuera una apreciación cierta y que todo el mundo conozca.

Para el juden, esto es estar en un país “radicalizado”, es decir, radicalmente opuesto a sus intereses.

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Centros de refugiados en Alemania contra iglesias en Polonia.

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Ataques terroristas en Europa.

El Economista:

“Son los políticos los que han hecho esta división entre musulmanes y no musulmanes”, comenta a Efe Maciej Fagasinski, abogado de Refugee.pl, fundación de apoyo a refugiados e inmigrantes.​

Las pasadas elecciones de 2015 los políticos trataron el tema de la inmigración y de los refugiados “con perfidia”, al decir que iban a “defender a los ciudadanos de los malos inmigrantes”. Las elecciones se saldaron con la victoria por mayoría absoluta del partido nacionalista y conservador Ley y Justicia, poco partidario de cumplir el compromiso del anterior Gobierno de acoger en 2016 a 7.000 de los refugiados y levantar diez centros de acogida.​

¿País que rechaza la inmigración, los refugiados, el feminismo, que es conservador e identitario y que es uno de los mejores ejemplos económicos y sociales de Europa?

La sociedad polaca es una de las sociedades étnicamente más homogénea de Europa, no son muy propensos a creerse la propaganda que les anima forzosamente a desaparecer.

De hecho, Polonia está convirtiéndose en el paraíso que todos soñamos cuando nos vamos a la cama y empezamos a mover los panzer en nuestras cabezas dirigiéndolos hacia el congreso de nuestros respectivos países.

¿No os lo creéis?



En Polonia, el grupo identitario Liga de Defensa Polaca (Polska Liga Obrony) realiza patrullas por los locales nocturnos de Varsovia para evitar que las chicas blancas interactúen con moros.

A su vez, el partido Ley y Justicia alerta de los virus, enfermedades y parásitos que traen los refugiados, lo que ha provocado la ira internacional y el brote de grupos que defienden una Polonia polaca.

Allí, los medios de comunicación son polacos y rechazan la inmigración, además existen grupos que torpedean los planes de ubicar centros para refugiados.

Un 59 % de los polacos está de acuerdo en abrir las puertas a ucranianos, ya que consideran que se integran fácilmente, son trabajadores, aprenden el idioma y, a fin de cuentas, son también eslavos.​

En una entrevista publicada semanas atrás por “Gazeta Prawna”, el presidente de la confederación de empresarios, Cezary Kazmierczak, afirmaba que los inmigrantes ucranianos y bielorrusos son “los mejores del mundo”, ya que no les quitan el trabajo a los polacos y no cuestan nada a los contribuyentes, porque no reciben subsidios. Por el contrario, decía, los llegados desde Oriente Próximo y África no vienen en la mayoría de los casos a trabajar, sino a beneficiarse de las prestaciones sociales.​

“A fin de cuentas son eslavos” y “no reciben subsidios como los moros”

Vamos, lo que viene siendo:

“Son blancos como nosotros y son personas mientras que los otros son marrones y son animales”

La semana pasada la revista Wsieci, publicación nacionalista con una tirada de 18.000 ejemplares, presentó en su portada la imagen de una mujer blanca (que sería la Unión Europea) atacada y manoseada por hombres de piel oscura con el título “Violación islámica de Europa”, ejemplo exagerado de ese enfoque populista.​

“Varios inmigrantes musulmanes nos dicen que ahora tienen más reparos al pasear por las calles o hablar en su idioma”, afirma Fagasinski, quien asegura que antes de los comicios una mayoría de polacos se mostraba a favor de la inmigración y no era tan negativa la respuesta ante los musulmanes.​

El nivel que llevarán para que los moros tengan miedo en Polonia tiene que ser de órdago.

Aproximadamente 1 millón de extranjeros ucranianos y bielorrusos trabajan en Polonia aportando 2.000 millones de euros anuales.

Polonia estaría necesitando alrededor de 5 millones de inmigrantes para mantener el crecimiento económico y asegurar pensiones.

Según la ONU, hay 4.701.465 polacos en el extranjero, especialmente en Alemania, Reino Unido y Estados Unidos, donde fueron para encontrar un mejor trabajo hace años. Esta cantidad supone un 12,38% de la población del país.

Si necesitan 5 millones de inmigrantes y tienes 4.7 millones de polacos étnicos fuera, ¿la ecuación es sencilla verdad?

Según los datos que publica Eurostat (agencia de estadística de la Unión Europea), el PIB de Polonia lleva creciendo más de 20 años consecutivos, es decir, el país logró esquivar incluso la Gran Recesión que asoló Europa. La conversión de Polonia en una economía de mercado ha sido uno de los grandes éxitos de las últimas décadas.​

“Tenemos que hacer que el regreso sea atractivo, especialmente para los jóvenes que abandonaron Polonia en los últimos años en busca de mejores condiciones laborales”, según ha explicado Szydlo durante una intervención en el foro económico de Krynica (sur).​

Los españoles que estén leyendo esta noticia y sean conscientes, entenderán con añoranza esta noticia, pues sabemos bastante bien lo que es que una población de jóvenes inteligentes deba abandonar nuestro país para poder encontrar un trabajo en otras partes de Europa.

Lo mismo con Venezuela y otros países similares.

¿Os imagináis un milagro económico en nuestros países seguido de un programa estatal que incite a traer de vuelta a nuestros cerebros mejor preparados?

Esto es justamente lo que hace Polonia ahora mismo, pero al revés, no exporta a su gente; la importa.

Por su bien, por su destino, y posiblemente por el ejemplo que nos están dando a todos, esperemos que Polonia nunca deje de ser polaca.

Lección de vida: Polonia importará “inmigrantes” blancos polacos en lugar de negros y moros
 
Y judios como tu que parasitan nuestro sistema sanitario gracias a Soros