Adiós a los motores de combustión en 2035. Ésta es la nueva directriz de la Comisión Europea, que este miércoles ha hecho público un plan de lucha contra el cambio climático que por primera vez pone fecha de caducidad a los vehículos térmicos.
A partir de 2035 ya no podrán venderse turismos nuevos que emitan emisiones de dióxido de carbono, por lo que esta medida afectará tanto a los coches de gasolina y Diesel como a las diferentes formas de hibridación que existen en el mercado.
La ley propuesta será de aplicación en todos los países de la Unión Europea, que no podrán legislar de forma individual al respecto.
Este anuncio pretende acelerar la renovación del parque automovilístico del continente, que aspira a convertirse en climáticamente neutro en 2050. Por esto fijar la prohibición en 2035 permitirá agotar la vida útil de los últimos coches que se pongan al mercado.
Es importante señalar que distintos estudios apuntan a que el precio de los coches eléctricos se abaratará notablemente en los próximos años, hasta el punto que a partir de 2026 ya se situará al nivel de los térmicos.
Es por esto que la fecha objetivo de 2035 debería de ser menos traumática para la economía familiar que lo que supondría ahora la adopción de un BEV.
Dado que será una transición progresiva, Europa calcula que en 2030 las emisiones de los turismos ya se habrán reducido un 55% respecto a 1990, paso previo de alcanzar el 100% en 2050.
El pronunciamiento de la Comisión Europea ocurre tres años después de que varios países de la Unión, entre ellos España, amagaran con legislar de forma individual al respecto.
El primer borrador de la Ley de Cambio Climático y Transición Energética del Gobierno del PSOE fijaba como fecha objetivo el año 2040, aunque esto se cayó en última instancia cuando la Comisión señaló que esta competencia le pertenecía a ella.
De este modo, la Unión Europea sigue los pasos del Reino Unido, que ya había anunciado que a partir de 2035 prohibirá la comercialización de vehículos con motor de combustión.
soymotor.com
A partir de 2035 ya no podrán venderse turismos nuevos que emitan emisiones de dióxido de carbono, por lo que esta medida afectará tanto a los coches de gasolina y Diesel como a las diferentes formas de hibridación que existen en el mercado.
La ley propuesta será de aplicación en todos los países de la Unión Europea, que no podrán legislar de forma individual al respecto.
Este anuncio pretende acelerar la renovación del parque automovilístico del continente, que aspira a convertirse en climáticamente neutro en 2050. Por esto fijar la prohibición en 2035 permitirá agotar la vida útil de los últimos coches que se pongan al mercado.
Es importante señalar que distintos estudios apuntan a que el precio de los coches eléctricos se abaratará notablemente en los próximos años, hasta el punto que a partir de 2026 ya se situará al nivel de los térmicos.
Es por esto que la fecha objetivo de 2035 debería de ser menos traumática para la economía familiar que lo que supondría ahora la adopción de un BEV.
Dado que será una transición progresiva, Europa calcula que en 2030 las emisiones de los turismos ya se habrán reducido un 55% respecto a 1990, paso previo de alcanzar el 100% en 2050.
El pronunciamiento de la Comisión Europea ocurre tres años después de que varios países de la Unión, entre ellos España, amagaran con legislar de forma individual al respecto.
El primer borrador de la Ley de Cambio Climático y Transición Energética del Gobierno del PSOE fijaba como fecha objetivo el año 2040, aunque esto se cayó en última instancia cuando la Comisión señaló que esta competencia le pertenecía a ella.
De este modo, la Unión Europea sigue los pasos del Reino Unido, que ya había anunciado que a partir de 2035 prohibirá la comercialización de vehículos con motor de combustión.
OFICIAL: Europa pone fecha de caducidad al motor de combustión
Adiós a los motores de combustión en 2035. Ésta es la nueva propuesta de la Comisión Europea, que este miércoles ha hecho público un plan de lucha contra el cambio climático que por primera vez pone fecha de caducidad a los vehículos térmicos.