Vaya hombre, otra vez... 🙄

Policías detienen a tres mujeres negras en EE.UU. y un agente le presiona el cuello con la rodilla a una de ellas

Dos agentes de la Policía de Chicago (EE.UU.) fueron suspendidos este viernes después de que atrajera la atención mediática el video de la detención violenta de tres mujeres afroamericanas indefensas, informa la prensa local.

En la grabación, publicada por Adrienne Gibbs, periodista y prima de una de las arrestadas, se ve como una decena de oficiales rodea un coche aparcado cerca de un supermercado y rompe las ventanas del vehículo con las porras. Momentos después, arrastran del vehículo a las mujeres y las tiran al suelo pese a que no ofrecen ninguna resistencia.




Según relató posteriormente a Chicago Sun Times una de las mujeres, Mia Wright, el incidente tuvo lugar el pasado domingo. Se desplazó hasta el supermercado con su familia para comprar comida, pero al llegar entendieron que el negocio estaba cerrado. No obstante, cuando decidieron irse descubrieron que "había mucha confusión, la Policía bloqueó muchas salidas y entradas y nos detuvieron".

Mia agrega que abrió la puerta por sí misma, ya que los agentes sacaron sus armas; sin embargo fue detenida de manera violenta: la sacaron del auto por el cabello, la esposaron y la tiraron al suelo, después de lo cual un oficial le presionó el cuello con la rodilla.

Wright fue detenida por alteración del orden público y pasó una hora esposada en una sala de interrogatorios. Luego, la llevaron al hospital por un pedazo de vidrio que se le metió en el ojo cuando los policías destrozaron la ventanilla de su coche.

"Un oficial me puso la rodilla sobre el cuello, la misma razón por la que cerca de aquí la gente protesta, en primer lugar, por lo que le pasó a George Floyd", dijo Wright, que añadió que "todo eso está relacionado".

 
Vomitivo comunicado de la Fundación de George Soros sobre los manifestantes por la muerte de George Floyd: les financiamos pero no protestan porque les financiemos

MF3fs84.png


Produce ya una indignación absoluta para muchos de nosotros incluso escuchar su nombre y esa indignación está más que justificada porque cada vez que hay problemas graves en algún país, siempre planea el nombre de George Soros en el ambiente como artífice o como sospechoso de ser el gran beneficiario de esos graves problemas.

Nosotros lo estamos padeciendo de la mano del gobierno de Pedro Sánchez y del separatismo catalán. Se sabe que con Sánchez ha mantenido unas cuántas reuniones secretas y también se sospecha que detrás de todos los altercados y todos los problemas que estamos teniendo con el separatismo catalán está la más que oscura figura de George Soros.

Pero si indigna saber todo esto, indigna más, todavía, saber los pocos escrúpulos que tiene con tal de conseguir su anhelado objetivo que no es otro que acabar con la presidencia de Donald Trump en Estados Unidos, a quien es más que evidente que detesta y que considera su enemigo acérrimo.

Tras la muerte de George Floyd en Estados Unidos, supuestamente a manos de un Policía, han surgido protestas en todo el mundo que han corrido como la pólvora y que dan toda la sensación de ser artificiosas y estar más que organizadas. También aparecen las sospechas de que George Soros anda detrás de todo esto en este caso.

Y ante las más que evidentes sospechas, su fundación, Open Society Foundations, emitió un comunicado el pasado día 1 que más que un comunicado en el que, más que tratara de exculparse de estar detrás de la organización de las protestas, decía todo lo contrario. Por supuesto, desde esa fundación apoyan esas protestas pero hay un párrafo más que llamativo que dice lo siguiente:

Estamos orgullosos de apoyar a las organizaciones que promueven el compromiso cívico y defienden el derecho de todos los estadounidenses a solicitar a su gobierno la reparación de agravios. Quienes protestan por la muerte del señor Floyd y la brutalidad policial en todo el país lo hacen por una profunda y constante preocupación por su país; no lo hacen por el pago de estas fundaciones ni de ninguna otra, como afirman algunos cínicos.

A buen entendedor, pocas palabras le bastan. Es decir, apoyamos a las organizaciones pero esas organizaciones no protestan porque nosotros las paguemos.

Ya, ya… Cuéntame un cuento…