El brote de ébola en el Congo podría extenderse a Europa por la inmigración ilegal

Pese a que la OMS ha pedido a los ciudadanos que no entren en pánico, si conviene hablar de los riesgos reales que conlleva que el ébola se haya convertido en una amenaza internacional debido a las cifras que se están registrando en la República Democrática del Congo.

Las cifras van a más y el porcentaje de mortalidad de esta epidemia supera ya el 65% y alcanza los 1.600 muertos.

Tedros Adhanom Ghebreyesus, director general de la Organización Mundial de la Salud (OMS), declaró que el brote es una emergencia de salud pública de interés internacional.

«Necesitamos trabajar juntos en solidaridad con la RDC para poner fin a este brote y construir un mejor sistema de salud. Durante casi un año se ha realizado un trabajo extraordinario en las circunstancias más difíciles. Ahora debemos asumir una mayor parte de la carga», dijo.

«Es esencial evitar las consecuencias económicas punitivas de las restricciones a los viajes y al comercio de las comunidades afectadas», añadió Tedros.

Pero la realidad es que la inmigración ilegal fomenta la llegada de ciertas enfermedades a España y al resto de Europa. Sin ir más lejos, el año pasado, con la llegada del Aquarius, varios agentes de la Policía Nacional fueron infectados con sarna, una enfermedad que afecta a la piel y que en España no es habitual.

Con la llegada de otras pateras, también se registraron casos de tuberculosis que obligaron a los servicios médicos a actuar con rapidez.